El proceso psicodiagnóstico incluye cuatro fases principales: El proceso comienza por la referencia del paciente a evaluación. Una buena referencia por sí misma determina en mucho el resultado del proceso. En principio es bueno hacer saber al paciente que la referencia para la evaluación no es indicativo de que algo esté mal con su caso, sino que por el contrario es parte de un buen proceso. Así también es bueno que durante la evaluación no se detenga el plan de controles que hasta ese momento lleva, y si está en un tratamiento psicoterapéutico, no suspender ni postergar las citas durante la evaluación. El psicodiagnóstico es un elemento que fortalecerá la alianza terapéutica y brindará nuevos elementos para ayudar al trabajo que juntos paciente y tratante llevan a cabo. En el caso de los especialistas psiquiatras resulta apropiado explicarle al paciente que de la misma manera que un traumatólogo requiere que su paciente se realice una placa o como el internista requiere de un exam...